Se considera publicidad exterior aquella que utiliza lugares públicos para desarrollarse, ademas es un medio eficaz para captar la atención de los clientes y clientes potenciales, en un mayor número de ocasiones, mientras estos se desplazan.

Existen dos grandes tipos de la publicidad exterior: la fija y la móvil. Dentro de la primera se encuentran las vallas, los carteles, o los paneles luminosos instalados en las aceras.

Por otro lado, la publicidad exterior móvil es la que se realiza mediante elementos publicitarios instalados en medios de transporte.

La publicidad exterior es un excelente complemento a las campañas publicitarias realizadas en otros medios de comunicación porque maximiza la cobertura, crea notoriedad y hace alusión a la marca, es ideal para campañas con amplia cobertura, es productiva y rentable.

El mensaje en la publicidad exterior debe ser totalmente visual y altamente creativo, con textos directos y sencillos para que se comprendan con un solo vistazo, que se complementen con la imagen a la perfección y permitan asociar con mayor facilidad el mensaje con el producto y la marca.